Cuando nuestros hij@s no sean lo suficientemente autónomos y maduros y los resultados académicos sean negativos, es conveniente que comprobemos qué hacen realmente durante el tiempo de estudio "encerrados" en su habitación. Para ello nada mejor qué controlar la hora de comienzo y la de final, mirar su agenda escolar y comprobar si se han hecho las tareas como deben de hacerse, o si sólo fueron capaces de "distraerse de cien maneras durante ese tiempo".
A esto se le suele llamar "estar encima", a ellos no les gustará demasiado, pero a veces no nos quedará más remedio, aunque suponga también un esfuerzo importante por parte nuestra. Y por supuesto, visitas y conversaciones continuas con los tutor@s. No confundir "estar encima" con hacerle nosotros los ejercicios o preparar los exámenes. Nuestra batalla será que maduren y que sean autónomos y responsables.
Si estamos "encima" es posible que ayudemos a nuestr@s hijos y que la situación mejore, seguramente evitemos sorpresas desagradables. Cualquier cosa menos arrojar la toalla. Si quieren , pueden.
JMM.
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